Las posiciones del Presidente de los Estados Unidos desestabilizan las relaciones internacionales. Los mercados financieros se enfrentan al Brexit. China intenta convertir Grecia en su nueva Ruta de la Seda. Las empresas ya no hesitan implantar un microchip bajo la piel de sus empleados.

En un mundo caracterizado por la rapidez, la radicalidad y la imprevisibilidad de los cambios en todos los ámbitos, en el que un mapa político puede ser redibujado en menos de doce meses, solo un conocimiento de alto nivel de las tendencias, metas y evoluciones de corto, medio y largo plazo puede ayudar a reducir las incertidumbres.